LaurisSs

domingo, 27 de septiembre de 2009

Mi familia


Al respecto de la nota anterior, me parece pertinente dar un breve espacio a la descripción de mi familia, los seres a quienes más amo en este mundo y que hacen que cada instante de mi vida sea muy feliz.

Primero mis papás, una pareja demasiado extraña, bueno muy modernos para su edad. A pesar de que hace diez años que se separaron hacen muchas cosas juntos, entre ellas vivir en la misma casa. Mi mamá es la encargada de mantener mis estudios, a ella le debo que yo pueda seguir en la carrera, a pesar de que no es nada económica; y mi papá, bueno si fuera por él yo estaría en un convento en este momento.

Mi hermana mayor, Fanny es un caos de ideas, es la "nada en su lugar". Es que es muy distraída y bastante olvidadiza, pero siempre intenta estar al pendiente de mi y de mi pequeña hermana. Fanny tiene una hija que se llana Evelyn, una chiquilla bastante traviesa e hiperactiva. Ellas viven con mi cuñado a un par de casas de donde yo vivo, por lo que nos visitan todos los días.

Jeny es mi hermana menor, ella es mi mejor amiga, es mi cómplice y confidente; con ella he pasado momento increíbles, sobre todo porque me entiende y siempre me apoya.

Esa es mi familia, a grandes rasgos, no es pequeña ni grande, simplemente es fantástica y admiro su gran y hermosa labor de soportar mis cambios hormonales, estrés de la escuela, problemas personales y todo eso que sólo a mí me sucede. =S

Accidente!!

La madrugada del sábado, como a las 6:00 am, exactamente en la entrada de mi casa ocurrió algo verdaderamente lamentable, algo que me dejó sin aliento y que me quitó hasta el hambre.

Resulta que una camioneta y un taxi chocaron, todos los días hay choques, en los periódicos podemos leer a diario noticias sobre choques y accidentes; pero esta vez fue más allá de un simple accidente.

Un muchacho, como de 16 años en estado alcohólico iba manejando la camioneta, que al parecer fue robada minutos antes del accidente, por lo tanto aquél muchacho iba manejando a gran velocidad. El conductor de un taxi fue sorprendido por esta camioneta de, el impacto fue tal que ambos vehículos salieron volando.

Los chicos de la camioneta, porque al parecer eran tres, salieron ilesos y rápidamente huyeron, mientras que el taxista y su pasajero quedaron atrapados dentro del taxi, el cual, ante el impacto, quedó comprimido impidiendo la salida de ambas personas, quienes finalmente fueron puestas a salvo por los paramédicos.

Los extraño de este caso es que una persona de edad avanzada estaba en medio de los coches que cocaron, del golpe que le dio la camioneta quedó tirado en la banqueta, y para no dar detalles de su estado, sólo podemos decir que sufrió una agonía de unos cuantos minutos para después fallecer.

La persona fue reconocida e inmediatamente llegaron sus familiares a la escena, la esposa e hijas lloraban con tanta desesperación que me puse a reflexionar sobre ese hecho.

En primer lugar porque los culpables de esa muerte huyeron cobardemente, a ellos no les pasó nada, pero una persona inocente murió por su falta de responsabilidad; cuántos de nosotros que salimos a la escuela o al trabajo, estamos expuestos a accidentes gracias a todos los irresponsables que se encuentran frente al volante, me refiero a conductores demasiado jóvenes, alcoholizados y demás, que muchas veces salen sin ningún rasguño y hasta tiempo les da para correr.

Por otro lado, mi mamá, mi abuelo y mi hermana salen a trabajar más o menos a esa hora, el solo hecho de pensar que pudiera ser alguno de ellos quien estaba por error caminando en la banqueta justo en el momento del accidente, me dejo un gran vacío, sobre todo al ver el dolor de aquella familia que lloraba en el lugar donde murió un ser querido que simplemente caminaba por la calle en el momento menos preciso.

domingo, 20 de septiembre de 2009

La caja de la FCPyS

Yo creo que a todos nos ha pasado alguna vez, ir a pagar las copias a la caja del edificio G de la facultad es todo una travesía ya que, para empezar hay que cruzar toda la facultad, después subir un piso de escaleras y hacer una fila que aunque a menudo no es muy larga, la lentitud con la que atienden los trabajadores es sumamente molesta.

El caso es que el viernes yo me disponía a pagar mis copias para mi clase de África, el monto exacto era de diez pesos con veinte centavos, sin embargo yo no traía más que un billete de cincuenta pesos.

La persona que atendía la caja en ese momento me pidió los veinte centavos para no fatigarse contando centavos y darme puros enteros, yo le dije que no los traía y me contestó muy grosera que le tenía que dar los veinte centavos a fuerza o me cobraría once pesos cerrados.

Por la actitud que ella mostró yo me enojé y le dije que no traía cambio y que era su deber tener cambio, puesto que esa era la "caja" de la facultad.

Total que al final, la trabajadora sacó una bolsa llena de monedas de diez y veinte centavos, me dio nueve pesos en puras monedas de aquella bolsa, el resto me lo dio en monedas de dos y cinco pesos, le dije que no iba a ser madrina de "volo", por lo tanto no necesitaba el cambio, que me diera por lo menos monedas de diez pesos, obviamente se negó a hacerlo, pero su jefe llegó al momento y le expliqué la situación por lo que terminó dando lo que yo quise.

Así, mi excursión a la caja de la facultad fue una pérdida de tiempo ya que tardó al rededor de 20 minutos, todo por no traer la cantidad exacta que tenía que pagar.

Esta experiencia me indujo a reflexionar sobre todo lo que los estudiantes dependemos de los trabajadores para hacer tramites tan simples dentro de la facultad como pagar las copias, hasta los más complejos como los horarios, el papeleo, etc. Además de la poca capacidad que algunas personas pertenecientes al STUNAM para cumplir con sus labores.

La noche del grito



Tal vez ya es un poco tarde para hablar de la noche del grito, sin embargo a mí me parece una fecha muy importante, pues aunque muchos dicen que es la única noche en que nos sentimos orgullosos de nuestra nacionalidad y nos brota lo mexicano por cada poro; yo siempre me siento orgullosa de serlo y del país en que vivo, por eso me preocupo por su situación actual y en qué podemos contribuir para mejorarlo.

Pero en realidad este es un relato de lo triste que se ha convertido la noche del grito, ya que, al menos en la delegación Coyoacán, que es donde vivo, hay grandes muestras de que la tradición mexicana del grito de independencia se ha convertido en el pretexto perfecto para cometer actos bandálicos e ingerir alcohol hasta más no poder.

Y es que la festividad en Coyoacán comienza en la tarde con puestos de antojitos mexicanos como sopes, pozole, quesadillas y pambazos, por supuesto probé cada uno de ellos. Además hay música y bailes regionales; sin embargo comienza a caer la noche y la plaza Hidalgo, que conmemora el centenario de dicho festejo, se llena de personas de todas las edades, pero no todos van con la finalidad de festejar, sino que algunos, aprovechando el tumulto para "bolsear" a los demás asistentes.

Todos sabemos que en Coyoacán hay muchos bares, así que más o menos a media noche, después de la ceremonia encabezada por nuestro jefe delegacional, las calles se inundan de personas alcoholizadas, algunos orinan en las calles o vomitan agrediendo el aspecto de la plaza Hidalgo.

Al siguiente día, la mañana del 16, es casi imposible pasar por ahí ya que el aspecto es muy desagradable y la plaza se convierte en un mega basurero, las luces, adornos y colores que vistieron la noche anterior la plaza quedaron destruidos; por eso me gustaría que todos tomáramos un poco de conciencia con respecto a nuestra manera de festejar y a la importancia que tienen nuestras tradiciones como símbolo de nuestra identidad.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Mi colonia

Un 1 de septiembre de 1971, es decir, hace 38 años, llegaron de todas partes del país enormes grupos de personas en busca de un lugar donde vivir.

Así, con machetes, cuchillo y palos defendieron un pequeño pedazo de tierra que más tarde se convertiría en el patrimonio de muchas de esas familias. De esta forma se funda la colonia del Pedregal de Santo Domingo, una de las más grandes en México y más pobladas.


Unos años más tarde, en medio de una gran tormenta, un rayo cayó justo en la rama de un pirul, la cual, se desprendió al instante del árbol y quedó tendida en el piso con la forma de un Cristo crucificado.

Las personas de la colonia tomaron este hecho como un milagro, y así todos cooperaron con material o trabajo para construir, en el corazón de la colonia, el templo donde aquel Cristo descansa.

Actualmente seguimos conmemorando estos acontecimientos (la invasión de la colonia y la formación del Cristo) en la segunda semana de septiembre.

Lo que a mí más me gusta de dichas festividades son los eventos culturales, la comida mexicana, los bailes regionales, la feria, pero sobre todo, el saber que nuestra tradiciones siguen muy arraigadas en cada uno de los habitantes de Santo Domingo.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Sueños cumplidos

Hace algún tiempo, me encontraba en la recta final del semestre, ya saben, exámenes, trabajos, estrés, mucho cansancio, sueño y demás.

Vivía en medio de este vaivén de sensaciones, cuando un día, camino a la escuela como de costumbre, subí aquel puente que se encuentra en la avenida Delfín Madrigal; el primer pensamiento que vino a mi mente fue: "cómo no me caigo ahora mismo y me rompo un brazo o una pierna... total, qué son unos cuantos días en el hospital sin hacer nada".

Como sabía que esa idea era muy ilusa, seguí caminando sin esperar que se volviera realidad. Lo que yo no esperaba era a aquel muchacho que se encontraba del otro lado del puente, bajo el efecto de algún estupefaciente.

Yo continué caminando y justo en el momento en que iba a bajar las escaleras, él perdió el equilibrio y me empujó, haciendo que cayera rodando hasta el final de las escaleras.

Afortunadamente Rodrigo (mi novio) iba conmigo y rápidamente me llevó al hospital. Lo que yo pensé que serían unos días sin hacer nada, se convirtieron en horas y horas de radiografías, masajes en el cuello, revisiones y seis semanas de usar un molesto collarín.

Obvio, mis vacaciones fueron una tortura; lo peor es que aquel incidente no terminó ahí, las consecuencias las sigo viviendo actualmente ya que dos días después tenía que presentar un examen y, por supuesto, no pude llegar, por lo que actualmente estoy recursando esa materia.

Tengan cuidado en lo que piden, porque muchas veces lo que queremos que nos suceda en un momento determinado, se convierte en una carga muy pesada a futuro.

sábado, 5 de septiembre de 2009

Mis amigos


En estos últimos días nada interesante se ha presentado en mi vida, sólo los mismos sucesos de siempre: escuela, tarea, Familia. Por eso quisiera dedicar esta entrada a hacer una breve descripción de las personas más importantes de mi vida: mis amigos.

En primer lugar esta Jenyffer, una adolescente de 15 años, que está un poco loca, sin embargo es la mejor amiga que tengo, además de ser mi hermana más pequeña. Su carácter es muy especial ya que algunas veces puede soportar cualquier broma, pero a veces se enoja por cualquier cosa.

Otro de mis mejores amigos es Abraham, él tiene 16 años y es novio de Jeny desde hace tres años. Abraham es un niño muy especial porque es bromista pero también me apoya cuando lo necesito. Una de sus cualidades es que le encanta la música, sobre todo el rock, sabe tocar varios instrumentos musicales como guitarra, bajo y batería. Yo creo que tiene un gran talento.

También está Sebastián, él es, aparentemente, el más distraído y reservado, sin embargo, ha demostrado ser un gran amigo. También posee talentos musicales y es quien siempre tiene un chiste para cada ocasión.

Samuel es la cordura y sabiduría del grupo, siempre me da lecciones de la vida y me da consejos para ser mejor persona. Es un amigo incondicional con el que siempre puedo contar, además es una gran persona.

Finalmente esta Rodrigo. Sin duda él es el mejor de todos mis amigos, no sólo porque es mi novio, sino porque con él he pasado los mejores 3 años 9 meses de mi vida. Hemos compartido tantos momentos, desagradables, tristes y felices, pero cada día que pasa soy más feliz con él.

Bueno, ellos son mis mejores amigos, a quienes quiero mucho; sin embargo no son los únicos puesto que también están Pamela, Paola, Selene y otros amigos de la facultad, a los cuales también dedicaré un espacio en su debido momento.